sábado, 28 de agosto de 2010

Cuando todo es más tenue


Dícese de las tardes en que uno cuenta granitos de arena, que lentamente se desvanecen hacia el interior del reloj. En esos momentos en los que las papilas gustativas a lo único a lo que se dedican es a sentir los sabores de una manera inexplicable.
Dícese de las sensaciones en la piel, y los vellos del brazo moviéndose a causa de la brisa. De los atardeceres inigualables. De las compañías... de las oportunidades.
Dícese de esos momentos que uno mantiene guardados en la retina, por el resto de su vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Qué carajo es el enamoramiento?

Casi 30 años en esta cosa redonda que gira y gira, haciéndome más vieja, conociéndome más, coleccionando personas, nombres y apellidos con ...